Tengan en cuenta que una electroválvula es en pocas palabras un elemento cuya función resulta ser realmente fundamental en circuitos que tienen el trabajo de regular el flujo de todo tipo de fluidos, especialmente del agua. Gracias a su amplio abanico de aplicaciones hace que sea verdaderamente necesario conocer un poco sobre sus características y funcionamiento para así poder manejarla adecuadamente en el momento que haga falta.
¿Qué es una electroválvula?
Cuando nos referimos o en su defecto cuando hablamos de una electroválvula, nos referimos directamente a un dispositivo electromecánico que es directamente diseñado para lograr controlar de lleno el flujo que circula por un conducto. Por lo habitual, este tipo de dispositivo únicamente dispone de las posiciones de abierto y de cerrado.
En este punto cabe señalar que es tipo de válvulas en sí se mueve por la acción de una bobina solenoide, lo cual la diferencia de las válvulas motorizadas, con un motor que acciona además el mecanismo y por lo tanto les permite tener posiciones abiertas como cerradas.
Clases de electroválvulas
Las electroválvulas disponen en este caso de dos partes básicas, una es el solenoide y la otra es la válvula. En algunos modelos de electroválvulas, el primero es el que convierte la energía eléctrica en mecánica y por ello es el que hace posible que se accione la válvula, mientras que, en otros modelos, estas cuentan con dos solenoides para poder hacer los movimientos de apertura y de cierre. así que, a partir de la configuración de estos dos elementos, es por lo cual nosotros podemos llegar a distinguir los diversos tipos de una electroválvula.
De tipo directo
Estos tipos de electroválvulas como tal son las que se usan en instalaciones tan habituales como es el caso de lavadoras, lavaplatos y también en sistemas de riego, etc. Una ventaja de estas en particular es que no necesitan de un solenoide que las mantenga todo el tiempo abiertas o cerradas.
Asistidas
Por otra parte, se encuentran las electroválvulas asistidas, en este caso es una válvula solenoide asistida que no precisamente está del todo controlada por el solenoide, sino que este como tal es el que ejerce su influencia sobre una válvula piloto secundaria para poder realizar la labor.
Funcionamiento de electroválvulas
Aunque no lo crean el funcionamiento de una electroválvula suele ser bastante sencillo, pues en este caso la membrana de la válvula se apoya justamente en el cuerpo con la ayuda del muelle, y de este modo evita de cierta forma que el líquido o el gas pase por la presión que ella misma ejerce en el momento y que está unificado tanto en la parte inferior como en la superior.
Para que lo entiendan mejor, en el momento en que se envía una señal eléctrica al solenoide de dicho dispositivo (electroválvula), la bobina se imanta y de inmediato levanta el émbolo, de esta forma, queda un pequeño agujero en la tapa de la válvula, que es por donde sale el líquido o el gas de la cámara superior. De este modo, cambia la presión y, por ende, se libera el orificio de paso general, lo cual hace que se comuniquen la entrada y la salida del flujo del líquido del cuerpo de la válvula.